Ming es un tipo de esos
que escriben a los hachazos
que siempre andan tras mujeres etéreas
delgadas como un hueso
de piel trasparente y ojos
bien claros
de tetas pequeñas, pero duras y pezones rojos.
Nadie sabe si Ming tomo San Pedro, Yague, Amanitas.
El bebe lo justo como para sobrevivir en invierno o en verano,
odia los vidrios rotos de botellas sobre el pavimento
prefiere meditar en algún antiguo bar
sobre como despertarse al mediodía
sin ninguna preocupación.