EL ABRELATAS DEL UNIVERSO

AVES SOLARES

lunes, 1 de diciembre de 2008

LA RUBIA


Excremento, por todas partes excremento
La maldita covacha repleta de mierda,
Y ella reía espantada con esa voz
De sucia melodía,
Sin embargo era la dueña de las ancas
Más sabrosas y erguidas en esa ciudad,
Sus tetas eran frutos exuberantes
Inquietantes
Como montañas en avalancha
Sus pezones: las cumbres místicas del Tíbet.
Su piel, ahhhhh! –su piel era un beso
Suave
Puro
Baboso
Parecía mentira que por el ojo de ese culo
Tan delicado (esa porcelana)
Hubiera salido tanta mierda,
Y no es que tuviera diarrea, no;
Su pubis de diosa hindú
Sonreía ante los soretes explosivos
Que largaba como torpedos.
Toda ella era una muñeca rubia
Que hervía de sangre
Y sus ojos grises
Con la fuerza de una canción triste
No participaban de la risa ebria
Que le provocaba toda aquella
Cagada gigantesca


Autor: Gustavo



1 comentario:

la judith dijo...

¡excelente!
¡erotánictónico!