La hija de Dios
arrojaba alabanzas al cielo
después arrojaba objetos
puteadas a los humanos
y le pedía perdón a su padre que decía estaba en las alturas
tenía el mejor verbo paranoico
para manipular personas
a las que atacaba impunemente
era una de esas defensoras de la palabra Verdad
de esas tan cerca de la mentira
la palabra Verdad la masticaba y te la escupía en la cara
como una bomba de dolor
la gente sin corazón habla mucho de la palabra Verdad
mucha Verdad
hace mal
prefiero el misterio
prefiero el amor
5 comentarios:
El amor, una canción que recorrió el cosmos y bajó a explicarle al mundo cómo carajo mover los pies y no tener miedo en apoyarlos en un mar.
Y vos... ¿vos sabías que detrás de un árbol se esconden los gnomos que me robaron unas cuantas plumas?, y los muy santitos se ríen, se miran de reojo y tienen que taparse la boca para no hacer tanto ruido y despertar a los viajeros que por ahí empezaban a armar sus valijas, pero como no tenían carpas...
En fin.
Voy cuando me pesen las pupilas.
Un abrazo de hermandad.
Agus.
Las pócimas cósmicas ;)
Gustavo, me encantó tu espacio. Mucha ironía, mucha verdad, mucho escondido.
Cariños!
"Verbo paranóico" contigo. Escurridizo, temeroso.
Tú, pequeño ratonzuelo. Pequeña y sumergida rata.
Sé tu carne, sé tu humanidad profana. Callada, siniestra.
(Muy bueno su blog, por cierto. ¡Felicitaciones!)
Me gustó mucho este poema!!
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